
Hojas frescas, césped.
Estiércol de animales
de corral: ovejas, cabras,
caballos, vacas...
Acelerador natural por su contenido
en bacterias y nitrógeno.
Descomposición rápida
(húmedos)
Materiales no compostables
Descomposición lenta
(húmedos)
Descomposición muy lenta
(secos)
Hojas secas, paja,
restos leñosos.
Ceniza de leña.
De procedencia orgánica
y sin productos químicos.
Nunca de carbón.
Tejidos naturales.
Algodón, seda, lino, lana, etc.
Serrín y virutas.
De madera sin tratar.
Pelo, uñas, astas, etc.
De animales o personas.
Papel, cartón, servilletas.
Que no contengan tintas.
Desbroce de setos duros,
ramas podadas.
En trozos de entre 5 y 10 cms.
Cáscaras de frutos secos,
huesos de frutos.
Cáscaras de huevo.
Bajan la acidez del compost.
Pañales, compresas,
tejidos sintéticos, plástico.
Madera tratada.
Contiene productos químicos.
Productos cocinados
con grasas o aceites.
Revistas, periódicos.
Contienen tintas y metales pesados.
Carne y pescado.
Producen mal olor
y atraen animales indeseables.
Materiales compostables
Servicio de asesoramiento: 928 36 22 33 · compostaje@benmagec.org
Restos de comida.
Verdura, fruta, posos de café e infusiones.
En poca cantidad:
· Los cítricos, por su gran acidez.
· El pan, porque la levadura sufre
fermentación anaeróbica.
· Productos lácteos, por su alto
contenido en grasas.
Restos de poda y jardín.
Desbroces de setos jóvenes, restos de
plantas, ores, plantas de maceta...
En poca cantidad:
· Acículas de pino y plantas cupresáceas,
por su carácter ácido.
Lechos de hámster, conejos
y animales domésticos herbívoros.
Colillas.
Restos de aspiradora.
Coque y ceniza
de carbón mineral.
Muy tóxico para los organismos.
Heces humanas,
de perros y gatos.
Tienen organismos patógenos
que contaminan el compost.
Insecticidas, desodorantes,
desinfectantes o disolventes.